“Yo, Don José Gervasio Artigas, argentino de la Banda Oriental…”

“Yo, Don José Gervasio Artigas, argentino de la Banda Oriental…”

Así, como reza el título de esta nota, comienza su testamento este argentino de la Banda Oriental, no siempre bien tratado por nuestra historia oficial, pero que merece la consideración de todos nosotros. El común de la gente considera a Artigas como prócer uruguayo y forjador de su independencia y nacionalidad, cuando en la realidad no fue así y también desconoce su trayectoria y su personalidad. La construcción de un Artigas uruguayo, no es nada más que eso, una construcción intelectual, ya que Artigas fue argentino y él siempre se consideró como tal. Decir y pensar que fue iniciador de la independencia uruguaya y de su nacionalidad no es ajustado a la verdad histórica y va justamente contra el pensamiento artiguista.

Pero veamos –en apretada síntesis– quién fue este personaje que gravitó en forma tan especial y decisiva y que tanta influencia tuvo en la historia argentina de la segunda década del siglo XIX, en lo que fue la Banda Oriental, en la mesopotamia (Entre Ríos, Corrientes, y los pueblos de Misiones), en Santa Fe y Córdoba, pertenecientes todas ellas a las Provincias Unidas del Río de la Plata, como se designaba a nuestro país en aquel momento histórico.

Orígenes
José Gervasio Artigas (o de Artigas), nació el 19 de junio de 1764 en Montevideo, cuando esta ciudad dependía de la Gobernación del Río de la Plata –o de Buenos Aires–, formando parte del Virreinato del Perú –recordemos que el Virreinato del Río de la Plata, fue creado recién en 1776–.

Fue el tercero de seis hijos. Su origen fue patricio, sus padres formaban parte de familias acaudaladas que habían sido los primeros pobladores de la ciudad. Su padre que era Capitán de Milicias, tenía campos. Cursó sus estudios en el Colegio del Convento de San Bernardino de los padres franciscanos en Montevideo. En el inicio de su adolescencia se trasladó a la Estancia El Sauce de propiedad de su progenitor, donde aprendió las tareas camperas y el manejo de las armas.

También se relacionó y tuvo estrecho contacto con el común de los habitantes de la campaña, los gauchos e indios charrúas.

Según algunos autores –y negado por otros– en sus años mozos, habría participado en tareas de contrabando, especialmente de cueros y ganados, que vendía en la frontera con el Brasil, introduciendo a la Banda Oriental, tabaco, aguardiente y ropa de procedencia lusitana entre
otros efectos.

fuente: NORBERTO J. CHIVILÓ
(Historia del Federalismo Rioplatense)