octubre 9, 2024

Abril sin recuerdo

HISTORIOGRAFIA desde Santana do Livramento, Brasil/Carlos Alberto Potoko para Diario Uruguay.

El silencio es uno de los argumentos más difíciles de luchar… En este Brasil lleno de valores cívicos, con tristeza observo que ya no hay celebraciones en las escuelas como la del 18 de abril, Día Nacional del Libro Infantil, porque en 1882 nació el primer escritor brasileño, Monteio Lobato, para escribir para niños. El día indio y el día del ejército brasileño 19 de abril Día del Tiradent, celebrado el 21 de abril, es una fiesta nacional que se estableció en honor al icono de la desconfianza minera que fue ejecutado en 1792. Y el Descubrimiento de Brasil, el 22 de abril de 1500, marcó oficialmente la llegada de los portugueses al territorio brasileño, porque la llegada de los Portugueses aquí fue uno de los aspectos más destacados de las grandes navegaciones, llevadas a cabo por ellos durante el siglo XV.

Y no hay nadie que hable de amor por el país estos días… Todo se vuelve controvertido con el tiempo. Estamos en un peligroso limbo de deconstruir nuestra historia. La narrativa descriptiva es real, no una declaración normativa, sino el fin de una memoria. Es muy difícil para maestros y jóvenes mantener una relación de concienciación cívica, ahora todo se discute en un nuevo patrón social y racial sin ir nunca a una biblioteca. La investigación va en contra de los valores de la Patria, muestra que el conocimiento de la historia es cada vez más compartir tiempo libre juntos en lugar de dirigir una escuela. Esto demuestra el poder ideológico de la masa y el consumismo colonizando cómo los estudiantes se encuentran y expresan sus sentimientos sin memoria hacia la Patria.

La paradoja de nuestro tiempo en la historia es que tenemos edificios más altos pero temperamentos más cortos, carreteras más anchas pero puntos de vista más estrechos. Gastamos más pero tenemos menos compramos más pero disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes, familias más pequeñas, más comodidades y menos tiempo para disfrutarlas. Tenemos más títulos, pero menos sentido, más conocimiento, pero menos saber, somos más especialistas, pero con más problemas, tenemos más medicamentos y menos salud.

Cruzamos el camino a la luna y de regreso, pero nos cuesta cruzar la calle para saludar a un nuevo vecino. Conquistamos el espacio exterior, pero no nuestro espacio interior. Hicimos grandes cosas, pero no mejores cosas. Limpiamos el aire, pero contaminamos el alma. Conquistamos el átomo, pero no nuestros prejuicios. Hoy escribimos más pero aprendemos menos. Planeamos más pero logramos menos. Construimos más computadoras para tener más información, pero cada vez nos comunicamos menos. Estos eran los días para viajar rápido… Recuerda darle la mano al maestro que una vez te enseñó todo esto.